Un campamento para chavales obesos que luchan por aceptarse a sí mismos y superarse cada día. Ese es el argumento de la serie Huge, cuyos directivos han decidido cancelar tras la primera temporada debido a un bajón de audiencia.Sus creadores, Winnie Holzman y Savannah Dooley, han querido mostrar su desánimo ante la noticia en un comunicado, aunque se han mostrado positivos por todo lo que han conseguido.
«Aunque es decepcionante no ser capaz de seguir avanzando con esos personajes a los que tanto queríamos, estamos muy agradecidos por haber tenido esta oportunidad», han afirmado.Por su parte, la actriz Nikki Blonsky se ha mostrado mucho más emocional sobre el fin de la serie. «A todos los fans que amaban Huge, gracias por vuestro apoyo.
Os quiero tanto como vosotros a mi personaje», ha escrito en su Twitter.Los fans, que habían encontrado en Huge uno de los pocos programas que no muestra a unos adolescentes con un físico ideal, también han mostrado su descontento a través de la red de microblogging.»Han cancelado una serie que estaba ayudando a muchos adolescentes y chicas de talla grande a aceptarse a sí mismos. Es un asco», publicó una de las seguidoras.
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