La serie protagonizada, producida y, en ocasiones, dirigida por Jennifer Love Hewitt alcanza su desenlace con una Melinda que debe enfrentarse a las situaciones más peligrosas de su vida. Mientras un espíritu acosa de nuevo a su familia, la médium se ve las caras con el fantasma resentido de una mujer asesinada, afronta el caso de un chico desaparecido en el que el culpable está dispuesto a matarla y, además, se ve envuelta en una terrible venganza entre enemigos. Pero, con la ayuda de Eli y Ned, Melinda conseguirá establecer una vez más el orden y resolver los asuntos pendientes de todos estos espíritus.
Sin embargo, la promesa de venganza del fallecido profesor Bendford se verá cumplida, ya que las sombras no cesarán hasta que Melinda deje de ayudar a los espíritus en busca de la luz. Así, en el último episodio de la serie, la médium será abducida por las sombras, que anularán su poder sobre el más allá. Por primera vez, Melinda comenzará a confundir a los vivos y a los muertos, poniendo de nuevo su vida en peligro. Sólo su hijo Aiden podrá intervenir para ganar esta última y definitiva ofensiva contra los macabros entres que se han llevado a su madre. La vida de Melinda estará en manos de su hijo. Él es el único capaz de hacer que la luz gane a la oscuridad.
Sabueso Muerto
Melinda y Aiden comienzan a sentir que un espíritu les espía. Aunque tarda en mostrar su rostro, la médium descubrirá que el espíritu que les acosa con bromas pesadas está disfrazado de payaso. Pero de momento el fantasma no recuerda quien es y no sabe porqué va vestido así. Con las pocas pistas que encuentra, Melinda descubre que es realmente un detective privado llamado Charlie Hammond.
A partir de ahí, Melinda y Eli intentarán solucionar el último caso del investigador privado y solucionar también sus asuntos pendientes. Las claves del caso podrían estar relacionadas con el novio de una amiga del fallecido Charlie.
Y de nuevo en esta ocasión, Aiden seguirá sintiendo extrañas presencias que Melinda no puede ver.
Combinación letal
Melinda y Jim deciden tener una velada romántica y para ello contratan a Kelly, una canguro, que se hará cargo de Aiden por unas horas. Pero la noche termina con un gran susto, ya que Kelly no podrá evitar que Aiden se ponga en peligro. Cuando el matrimonio regresa a casa, Melinda descubre que el fantasma de una mujer acosa a la canguro.
Lo primero que harán Eli y Melinda será consultar con las madres de otros niños que anteriormente ha cuidado Kelly. Y las primeras referencias no son nada alentadoras, ya que parece que la chica tiene problemas con el alcohol. Pero continuarán investigando la situación, hasta solucionar los asuntos pendientes del espíritu.
Dinero sangriento
Lo que empieza como una noche de juerga de tres amigos termina con un buen susto, ya que uno de ellos desaparece en un antiguo granero. Consternado por los extraños acontecimientos que vivieron, uno de los amigos acudirá al profesor Eli James, ya que piensa que la policía no les tomará en serio. De esta manera, Eli y Melinda irán inspeccionar el lugar y descubrirán que el espíritu de un chico, que pudo ser asesinado, ronda el lugar. Para hallar respuestas a ambas desapariciones, tendrán que investigar un antiguo caso sin resolver.
Poco a poco, entenderán que la avaricia provocó una muerte. Y ahora el espíritu del arrepentido chico sembrará el pánico en el lugar hasta que no resuelva sus asuntos pendientes. Melinda tendrá que encontrar sentido a sus visiones y ayudar al fantasma a llegar hasta la luz. Además, la médium volverá a ser advertida de que ella o su hijo están en el punto de mira de las sombras.
Idénticos
En esta ocasión, Melinda se ve en medio de una peligrosa venganza entre enemigos cuando intenta ayudar a un espíritu. Todo comienza con la llegada al anticuario de una joven que quiere vender las pertenencias de su padre, fallecido hace un año. Desde ese momento, la médium empieza a tener visiones de espíritus idénticos a personas que están vivas. Primero verá al actual novio de la joven, pero después tendrá espantosas visiones de Aiden, Jim y Delia en peligro. A pesar de estar aterrorizada ante la posibilidad de que sus visiones sean premonitorias, tendrá que resolver los asuntos pendientes del espíritu y descubrir también si de nuevo las sombras están detrás de todo esto.
Por otro lado, Jim y Melinda discutirán sobre la educación de Aiden. Por un lado, Jim pretende que su hijo se mantenga a salvo y alejado de los fantasmas, y mientras que Melinda considera que Aiden debe aprender a vivir su don.
El desfile de los niños
Mientras Melinda intenta ayudar al espíritu de un niño que tiene revolucionado al hospital de Grandview, las sombras lograrán poseer a la médium que, sin saberlo, dejará de distinguir entre los vivos y los muertos. Este hecho, podría incluso poner en peligro su vida y la de su hijo. De este modo, las sombras consiguen un primer paso para lograr su objetivo: que Melinda deje de ayudar a los espíritus a seguir la luz.
Esta complicada situación empeorará cuando Eli también es abducido por las sombras. De este modo, Aiden será el único que pueda salvar a su madre del peligro. Para lograrlo, el niño tendrá que superar sus miedos y convencer a su padre para actuar por primera vez solo ante las sombras.
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