¿Quién vive ahí? se colará el próximo domingo, 11 de marzo, a las 23:30 horas en una moderna casa madrileña del siglo XVIII. Situado en un barrio céntrico de Madrid, el piso, de un reconocido interiorista, está remodelado completamente. Su propietario descubrió sus techos de más de 4 metros de altura, a los que ha sacado mucho partido. Está decorado con un mobiliario poco convencional: una escayola como cabecero de la cama, una lámpara hecha con cortinas para ahuyentar a las moscas o incluso butacas rescatadas de un contenedor.
También en Madrid el programa descubre un chalet de 700 metros cuadrados donde el blanco, el gris y plateado son únicos colores de la vivienda. Su dueña ha cuidado cada detalle y ella misma ha diseñado los muebles y objetos decorativos. Han reservado un lugar especial para hacer fiestas con los amigos: el sótano que lo han convertido en un disco pub.
En Valencia una familia numerosa enseñará su curioso y original piso. La casa está distribuida en base a cuatro cubos de cristal en la parte central que divide la casa en dos espacios: la zona de día y la zona de noche. Sus, propietarios, orgullosos de su vivienda, la denominan “la casa chula”, porque así la llamaron desde un primer momento su hijos pequeños.
En Ibiza ¿Quién vive ahí? visitará la casa de una pareja alemana con alma ibicenca. El sabor de la isla está presente en la vivienda, llena de comodidades y con abundantes obras de arte. La dueña, una mujer muy vital, está enamorada de cada rincón de sus 350 metros cuadrados, sobre todo de su dormitorio donde disfruta de un jacuzzi, chimenea y un gran vestidor. El porche, con una gran piscina, es uno de los lugares favoritos de la familia.
Además una distinguida villa en San Sebastián construida en 1930 nos abre sus puertas. Un estilo clásico y sobrio se mezcla con elementos modernos. Techos abovedados, elegantes escaleras, puertas palaciegas conviven con lo más funcional y práctico.
En Benalmádena, provincia de Málaga, visitamos una lujosa casa al borde del mar de un matrimonio enamorado de la Costa del Sol. Grandes espacios luminosos, mármoles italianos y ante todo unas fabulosas vistas al Mediterráneo. Nos llama la atención el porche interior de 70 metros cuadrados y una terraza exterior de 240 metros cuadrados.
¿Quién vive ahí? se desplazará al Pirineo aragonés para conocer la casa de un empresario que encuentra la calma en la montaña. La lujosa vivienda tiene 1.000 metros cuadrados, y de ella podemos destacar los 2 salones, y las 2 bibliotecas, ya que su dueño es un gran lector. Y, como gran viajero que es, tiene extraordinarias piezas de diferentes lugares del mundo como un totem que pesa 5 toneladas y mide 7 metros, aunque su pieza favorita son unas armaduras de samurai.
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